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7 octubre, 2020Recientemente se ha descubierto que uno de los inesperados efectos secundarios del coronavirus podría ser la pérdida de cabello. Los efectos se notan unos meses después de pasar la enfermedad, durante la que se puede debilitar la raíz del cabello. Sin embargo, no hay que alarmarse: se trata de un tipo de alopecia temporal y en la mayoría de los casos el cabello volverá a crecer con normalidad a los pocos meses.
Es importante además recordar que la caída del cabello es un proceso natural que nos afecta con más intensidad en determinadas etapas de nuestra vida. Aun así, si esta pérdida de cabello es más intensa de lo habitual, existen muchas variables que pueden estar provocando la caída del pelo: el estrés, los cambios hormonales o incluso la llegada del otoño son muchos de los factores que influyen en este proceso.
Si te preocupa la caída del cabello, te damos algunos consejos que pueden evitar que sea más acentuada de lo habitual y que te ayudarán a tener una melena sana y fuerte:
- Protégelo del calor. Utilizar en exceso planchas, rizadores o secadores para moldear el cabello puede debilitarlo y provocar su rotura. Si su uso es inevitable, recuerda usar un protector térmico para minimizar el efecto del calor sobre el pelo.
- Mantén una buena rutina de cepillado. Los peinados que agarran el pelo con mucha fuerza pueden provocar un debilitamiento del cabello y provocar su caída. Es importante además cepillar nuestra melena correctamente, ya que los tirones y los nudos pueden dañar el cuero cabelludo y provocar la rotura de las fibras capilares. Para evitarlo, es recomendable comenzar a cepillar por las puntas para acabar en las raíces.
- Mantén una dieta saludable. Una alimentación rica en vitaminas y minerales puede ayudar a frenar el problema desde el interior. Incorporar a nuestros platos ingredientes como nueces, huevos, zanahoria, marisco y espinacas, entre otros, puede ser el apoyo que tu pelo necesita para hacer frente a la caída del cabello. Las sardinas, por ejemplo, son ricas en vitamina B6, contribuye a la síntesis normal de la cisteína.
- Puedes recurrir a complementos alimenticios que contengan L-cisteína, vitaminas y minerales, que favorecen el crecimiento del pelo y su mantenimiento. Y Keratina bioactiva, que mejora la estructura del cabello y reduce la caída un 30%.
- Hidrátalo bien. La clave para tener una melena sana y flexible es mantenerla bien hidratada. Saltarse este paso, que es esencial, puede desembocar en un cabello más seco y frágil, que se pierda con más facilidad.
- Evitar el estrés. La vuelta a una nueva normalidad puede también afectar a la caída del pelo. Una nueva situación que requiere de tiempo para adaptarse por lo que la organización y el planteamiento de objetivos a corto plazo serán fundamentales.
No olvides que, si a pesar de seguir estos consejos, esta no es una situación transitoria y la caída se prolonga, debes acudir a un profesional que identifique la causa del problema y te aconseje al respecto.
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