Salud Digestiva: la importancia de cuidarse por dentro
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24 julio, 2020Inaugurada la temporada estival, las temperaturas empiezan a aumentar y las ganas de hacer una escapada a la playa y a la montaña, también. Sin olvidarnos de los días con amigos y familia en la piscina, reencuentros en los que el sol será un gran aliado pero también un agente a tener en cuenta con el fin de evitar los temidos efectos negativos que puede provocar sobre nuestra piel.
Tras meses sin tomar el sol debido al confinamiento, la vitamina D ha disminuido en nuestro organismo provocando algunas carencias. Nuestra piel, más sensible que nunca, necesita prepararse para acoger los primeros rayos de sol, por eso, se debe tener más cuidado y prestar mayor atención a su protección evitando los efectos de los rayos ultravioletas.
La OMS (Organización mundial de la Salud) recomienda unas pautas sencillas para protegernos del sol, que serán fundamentales de cara a la exposición solar, sobre todo, después de estos días en los que hemos permanecido en casa. La mejor protección será la ropa ya que permite absorber el calor pero evitando las quemaduras y en las zonas donde la ropa no protege se debe utilizar crema con filtro solar, lo que no justifica la prolongación a la exposición solar. Además:
- Se debe evitar las horas centrales del día ya que los rayos UV solares son más fuertes en el horario de 10 de la mañana a 4 de la tarde. Por lo que se debe recurrir en otros horarios a esta fuente de vitaminas.
- Un aliado contra los rayos más potentes son las sombras pero no pueden justificar en ningún caso que la incidencia continua estando y por tanto debemos usar protección.
- Usar cremas con filtro solar, se recomienda que sea de amplio espectro y que supere la protección 30. Se debe extender por toda la zona que vaya a estar expuesta y repetir el proceso cada dos horas.
- También recomiendan el uso de accesorios como uso de sombreros, gorros anchos de verano para proteger la cara o gafas de sol, que reduzcan los daños oculares.
- La hidratación es otro aspecto a tener en cuenta, debemos beber agua para evitar mareos o esa sensación de agotamiento muchas veces provocada por el calor.
- En los días nublados también podemos quemarnos, por lo que no debemos olvidar aplicarnos protección solar a la hora de salir de casa. Lo ideal para asegurarnos que nuestra piel no sufre es optar por cremas hidratantes con SPF.
De cara a este nuevo verano, contaremos con un acompañante imprescindible: la mascarilla. Aunque muchos pueden creer que ésta protege del sol, es fundamental aplicarnos protección en esta zona para evitar que nuestra piel sufra quemaduras, aparezcan los temidos signos de envejecimiento e incluso alergias.
Además, de seguir todas estas pautas y recomendaciones, deberemos también cuidarnos desde dentro con una alimentación saludable y rica en vitamina D, la cual
será esencial para el buen funcionamiento inmunológico, tiene carácter antinflamatorio y una gran repercusión en el estado de ánimo.
¿Dónde podemos encontrar la vitamina D? En el pescado azul, hongos y setas, marisco, huevos…
Además, los complementos alimenticios se postulan como los aliados para reforzar esta protección interna via oral: apuesta por aquellos que contenga carotenoides, vitaminas, Coenzima Q10 y Red Orange Complex® (ROC). Mientras que la vitamina E y el Selenio contribuyen a la protección de las células frente al daño oxidativo, la vitamina C, además, contribuye a la formación normal de colágeno para el funcionamiento normal de la piel.
Estos son algunos de los consejos que recomiendan los expertos para, poco a poco, ir adecuándonos a la exposición solar, y es que siempre será beneficioso exponernos al sol por los grandes beneficios que proporciona a nuestro cuerpo y mente, pero siempre de manera responsable y cauta.
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